Salud y alimentación
Agricultura y mercado

¿Fin para el boom del tomate en Mendoza? Desaparecen 10.000 productores y se aleja el autoabastecimiento

La caída en las hectáreas implantadas bajó más de 10% el último año, pero subió el kilaje que entrega cada parcela utilizada.

La provincia cuyana se había transformado en una de las regiones líderes del país en producción de tomates, pero experimentó una reducción cuantitativa a nivel de jugadores en el mercado. Sin embargo, las cantidades cosechadas no han variado.

Junto con San Juan, los mendocinos concentran al 80% de la producción de Argentina. El resto de la superficie se encuentra distribuida entre Salta, Jujuy, Corrientes, Formosa, Río Negro y Buenos Aires.

Plantación de tomates. Imagen: Ing. Agr. Verónica Casarrubia

En la post pandemia existió un verdadero boom por este cultivo tan presente en la dieta de las familias de todos los estratos sociales. Este cultivo llegó a representar en Mendoza el 22% de la superficie cultivada, ubicándose tercero después del zapallo y de la papa. El consumo de tomate fresco ronda los 16 kilogramos por persona por año, y dentro del rubro hortícola, sólo es superado por la papa.

Tres razones que indican por qué caen las áreas sembradas

La primera razón es la cotización muy apreciada del dólar en Argentina que dificulta las exportaciones y tienta a la industria para comprar la pasta fuera de nuestras fronteras.

Hasta hace pocos meses, un productor local de tomate redondo debía vender 4 kilos para comprar un kilo de pan. Sin embargo, a fines de 2024 debió desprenderse de casi 12 kilos de este producto para garantizar igual consumo en una panadería.

Tomate perita. Imagen: Ing. Agr. Silvia Dal Santo

La misma cuenta se podría hacer con el gasoil. Para comprar un litro de ese combustible se necesitaba vender 2 kilos de tomate hace poco más de un año, pero esa cifra llega hoy a más de 5 kilos por litro.

En la nueva cadena de valor con una divisa norteamericana cotizando de manera tan débil los agricultores han perdido rentabilidad.

En segundo lugar, está el carácter perecedero del tomate. Los hombres de campo no tienen poder de negociación importante frente a una industria que luce cada vez más concentrada y fija precios que no tienen relación con los costos y los riesgos de cada temporada. A menudo, los holdings tanto nacionales como extranjeros prefieren importar materia prima (pasta y concentrado) para luego procesar en Argentina.

Ing. Agrónoma Silvia Dal Santo. Imagen: IG

En tercer lugar, porque se produjo un cambio en la producción y la industria. Consultada por Carbono.news, la ingeniera agrónoma Silvia Dal Santo explicó: "A fines de los años 90 se desarrolló en el país un programa que se llamó Tomate 2000. Significaba aplicarle mayor nivel de tecnología a los cultivos recurriendo a las semillas híbridas, manejo de los suelos, curaciones, trasplantes mecánicos y cosecha con grandes maquinarias. La aplicación de este paquete tecnológico mejoró enormemente la productividad".

"En una hectárea se lograban hace 3 décadas unos 40 mil kilos, pero hoy se ha trepado hasta los 150 mil kilos por hectárea o más. Eso significa que, a pesar de contar con menos productores, el volumen final obtenido es parecido al nivel histórico. Las industrias grandes también aumentaron mucho su capacidad de elaboración" explicó la profesional.

Finalmente, Dal Santo informó que los precios de este commodity se manejan a nivel internacional, por lo cual es casi imposible mejorar los términos de intercambio de manera unilateral.



Esta nota habla de:
Más de Salud y alimentación
Una startup busca hacer inmortales los alimentos a través de la ciencia y la IA
Salud y alimentación

Una startup busca hacer inmortales los alimentos a través de la ciencia y la IA

Una mendocina lidera Migma, la startup global que fusiona Inteligencia Artificial y ciencia aplicada para extender la vida útil de alimentos
Cambio climático: el invitado no esperado en la epidemia del dengue en América Latina
Salud y alimentación

Cambio climático: el invitado no esperado en la epidemia del dengue en América Latina

El aumento en las temperaturas y la mayor presencia de eventos climáticos extremos lleva a cambios en el virus, en el mosquito que lo transmite y en el comportamiento humano, lo que impacta en la incidencia de la enfermedad
El cambio climático hace estragos en la salud mental de Latinoamérica
Salud y alimentación

El cambio climático hace estragos en la salud mental de Latinoamérica

El aumento de olas de calor, sequías y desastres naturales está provocando efectos profundos en la salud mental de quienes los viven de cerca