Ambiente y naturaleza
¿Ecocidio negligente?

La difícil situación de la fauna autóctona en Australia

Australia, conocida por su biodiversidad única y sus ecosistemas variados, enfrenta hoy uno de los desafíos más críticos en la conservación de su fauna autóctona. La combinación de factores como el cambio climático, la deforestación, la expansión urbana y la introducción de especies invasoras ha puesto en peligro tanto a especies emblemáticas como a ecosistemas enteros.

"La pérdida de hábitat, el cambio climático y las especies invasoras son las principales amenazas para la fauna australiana", afirma el Dr. John Woinarski, experto en biodiversidad de la Universidad Charles Darwin. "Necesitamos acciones urgentes y coordinadas para proteger lo que queda."

Cuando pensamos en Australia la mayoría evocamos una naturaleza salvaje, con una fauna particular que no se encuentra en ninguna otra parte del mundo. Según el informe de 2021 del Australian Department of Climate Change, Energy, the Environment and Water, más de 1800 especies y comunidades ecológicas, incluyendo animales, plantas y hongos australianos figuran en las listas de especies amenazadas. La Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) también destaca numerosas especies australianas en peligro crítico, incluyendo aves, mamíferos, reptiles y anfibios.

El koala -símbolo nacional- enfrenta una disminución del 80% en su población en los últimos 20 años debido principalmente a la pérdida de hábitat y a la propagación de la clamidiasis, una enfermedad bacteriana que afecta a los ejemplares. La directora de la Australian Koala Foundation, Deborah Tabart, advirtió "sin una acción urgente, esta especie puede desaparecer en el próximo decenio". La fundación estima que en 2022 solo quedaban unos 80.000 ejemplares en estado salvaje.

La International Union for Conservation of Nature (IUCN) clasifica otras especies icónicas de Australia como el bilby, un pequeño marsupial nocturno, el demonio de Tasmania, el walabí de puerto, otro marsupial, el quokka y el pinzón loro de cara azul como también en declive y con escasas poblaciones silvestres.

Pinzón loro cara azul, Quokka, Wallabie con su cría, Bilby. 

Demonio de Tasmania. Pixabay

La científica Dra. Linda Broome, quien trabaja en conservación de especies australianas, afirma que "la depredación por gatos y zorros, junto con la pérdida de hábitat, ha reducido drásticamente sus números".

Impacto del cambio climático y los incendios forestales

Los devastadores incendios forestales que se produjeron en los últimos años destruyeron vastas áreas de hábitats naturales.

El verano de 2019-2020 fue uno de los más destructivos en la historia de Australia, con incendios que arrasaron aproximadamente 18 millones de hectáreas, según datos del Royal Fire Service. Organizaciones ambientalistas informan que más de mil millones de animales, incluyendo aves, mamíferos y reptiles, murieron en las llamas o quedaron sin refugio.

La prolongada sequía y las altas temperaturas, junto con fenómenos climáticos extremos, están agravando la crisis. La bióloga Dra. Amanda Lloyd, especialista en incendios forestales, declara: "El aumento en la frecuencia y severidad de incendios atribuidos al cambio climático ha llevado a la pérdida insostenible de biodiversidad. Es una crisis de escala global, estamos en una carrera contra el reloj".

Introducción de especies invasoras y su efecto perjudicial

La llegada de especies invasoras, como gatos, zorros rojos, sapos de caña, conejos europeos, jabalíes y ciertos mamíferos y plantas no autóctonas, también ha tenido un impacto devastador en la fauna local. Estas especies compiten por recursos, depredan especies vulnerables y alteran los equilibrios ecológicos. En algunos casos, las especies invasoras han contribuido a la extinción local de varias especies nativas.

Controversia: la matanza de koalas en nombre de la eutanasia

La situación de los koalas es particularmente preocupante. La pérdida de hábitat debido a la deforestación y los incendios forestales ha reducido drásticamente sus poblaciones. En algunas áreas, se han propuesto medidas controversiales como la "eutanasia" de koalas enfermos o heridos, lo que ha generado indignación entre los conservacionistas. Esto es posible, en parte, porque en algunos estados del país no está considerada una especie amenazada, sino que está clasificada como una "especie nativa protegida".

Mirá también: ‘La ventana de oportunidad para frenar la pérdida de biodiversidad se cierra un poco más cada día'

Una de las acciones más preocupantes sucedió en Nueva Gales del Sur en 2020, cuando el gobierno autorizó la eutanasia masiva en áreas afectadas por incendios, alegando controlar así la propagación de clamidiosis y reducir el sufrimiento de las víctimas del fuego. Organizaciones como The Humane Society y la Australian Conservation Foundation criticaron estas acciones, declarando en un informe: "El uso indiscriminado de eutanasia en animales sanos o con posibilidades de recuperación viola principios éticos fundamentales y afecta el espíritu de conservación". Además, denunciaron que "las acciones actuales son inhumanas y no tienen base científica sólida" (HSI Australia).

Koalas. Pixabay 

A pesar de todas las manifestaciones en contra, la matanza se repitió en el mes de marzo de este año y 750 koalas fueron abatidos por francotiradores desde helicópteros, tras un incendio en el Parque Nacional de Budj Bim, en el sureste de Australia.

La justificación otorgada por el Departamento de Energía, Medio Ambiente y Acción Climática de Australia (DEECA) alegaba que, a raíz de un incendio que afectó más de 2000 ha de bosque, muchos koalas resultaron heridos, deshidratados y hambrientos y se debía acortar su sufrimiento.

Muchos ambientalistas cuestionaron que se pudiera evaluar el estado de salud de los animales desde un helicóptero y además afirmaron que esta metodología tampoco permite saber si entre los ejemplares abatidos se encontraban hembras portando a sus crías en sus bolsas marsupiales.

Políticas ambientales y promesas incumplidas

A pesar de que en el país, desde 1788, se han extinguido aproximadamente entre 1 y 2 especies de mamíferos terrestres cada década (lo que hace que Australia sea líder en extinción de mamíferos), la protección de la naturaleza estuvo ausente de la reciente campaña electoral, luego de un mandato marcado por las promesas incumplidas del gobierno laborista, nuevamente triunfante.

Wombat. Pixabay

A lo largo de los años, los compromisos gubernamentales para proteger especies vulnerables han sido frecuentes, pero su implementación ha sido deficiente.

En 2019, el gobierno prometió un fondo de AUD 40 millones para la conservación, pero un informe de la Australian Conservation Foundation indicó que "el dinero efectivo destinado a acciones concretas ha sido mucho menor y disperso, sin un plan coordinado a largo plazo". La politización y los intereses económicos, especialmente en minería y desarrollo, dificultan avances efectivos.

Mirá también: Cómo es el trabajo en Argentina para evitar la extinción de especies autóctonas

El Informe de Auditoría del Parlamento de Australia 2022 concluyó que "menos del 50% del presupuesto prometido para programas de conservación ha sido efectivamente desembolsado, con una implementación fragmentada y poco coordinada". La ONG Australian Conservation Foundation ha señalado que "las políticas actuales no logran abordar las causas estructurales que amenazan la biodiversidad".

La legislación ambiental en Australia ha sido objeto de críticas y controversias. Organizaciones como la Sociedad Australiana de Conservación (ASOC) denuncian la falta de aplicación efectiva de las leyes existentes y la influencia de intereses económicos en las decisiones políticas. "Las leyes ambientales de Australia son débiles y están mal aplicadas", declara un portavoz de ASOC. "El gobierno debe priorizar la conservación de la biodiversidad por encima de los beneficios a corto plazo de la industria".

La aprobación de proyectos de desarrollo que impactan negativamente en hábitats críticos es un tema recurrente. La expansión de la minería, la tala de bosques y la urbanización descontrolada contribuyen a la pérdida de biodiversidad y al aumento de la presión sobre las especies amenazadas.

Según la Fundación Australiana para la Conservación, más de 25.000 hectáreas de hábitats naturales de especies en peligro de extinción han sido destruidas desde que el Partido Laborista regresó al poder en 2022. Al mismo tiempo, el gobierno de Anthony Albanese ha dado su aprobación a diez proyectos para abrir o extender la vida útil de las minas de carbón en el país. Todo indica que debido a la aplastante victoria de Albanese como primer ministro en las elecciones del 3 de mayo el panorama no cambiará demasiado.

Esfuerzos de conservación y desafíos futuros

Expertos advierten que, si no se toman medidas urgentes y efectivas, muchas especies australianas continuarán en peligro de extinción. La pérdida de biodiversidad no solo afectará la riqueza natural del continente, sino que también tendrá repercusiones en los ecosistemas y comunidades humanas que dependen de ellos. La implementación de políticas ambientales ambiciosas, acompañadas de recursos adecuados y una mayor conciencia social, será clave para revertir esta tendencia.

El gobierno australiano, junto con organizaciones internacionales y locales, ha lanzado múltiples campañas de conservación. Proyectos para rehabilitar hábitats, programas de cría en cautiverio y control de especies invasoras son algunas de las iniciativas en marcha. Sin embargo, el alcance de estos esfuerzos a menudo se ve limitado por la falta de recursos, los desafíos políticos, el avance de la minería y la expansión urbana, y la magnitud de la crisis.

El futuro de la fauna australiana depende de la voluntad política y de la implementación de medidas de conservación efectivas. Es fundamental fortalecer la legislación ambiental, aumentar la inversión en investigación y conservación, y promover prácticas sostenibles en la agricultura, la silvicultura y la minería.

Como señala el ecólogo Chris Johnson: "Nuestro compromiso y recursos definirán si dejamos un legado de conservación o uno de extinción".


Esta nota habla de:
Más de Ambiente y naturaleza
Un hito histórico para la conservación: juveniles de Macá Tobiano criados en cautiverio fueron liberados en su hábitat natural
Ambiente y naturaleza

Un hito histórico para la conservación: juveniles de Macá Tobiano criados en cautiverio fueron liberados en su hábitat natural

os protagonistas de este acontecimiento son tres pichones de Macá Tobiano (Podiceps gallardoi), una especie emblemática de la Patagonia, nacidos en la Estación Biológica "Juan Mazar Barnett", donde trabaja el Programa Patagonia de Aves Argentinas.
Metano: El Enemigo Invisible que Acelera el Cambio Climático
Ambiente y naturaleza

Metano: El Enemigo Invisible que Acelera el Cambio Climático

En la lucha contra el cambio climático, el dióxido de carbono (CO2) ha sido el villano más nombrado. Sin embargo, hay otro gas de efecto invernadero que, aunque menos abundante, es mucho más potente y está jugando un papel cada vez más preocupante: el metano (CH4).
La crisis económica y la minería ponen en peligro a los pueblos indígenas en Bolivia
Ambiente y naturaleza

La crisis económica y la minería ponen en peligro a los pueblos indígenas en Bolivia

Líderes indígenas e investigadores están preocupados por el avance de la minería, ya que el gobierno nacional apuesta por la extracción para impulsar la economía y el suministro de combustible