América Latina busca posicionarse como proveedora de créditos de carbono a través de acuerdos bajo el Artículo 6 del Acuerdo de París. Pero sin una estrategia clara de largo plazo, expertos advierten que la región podría terminar vendiendo reducciones de emisiones que necesitará en el futuro. Mientras algunos avanzan con un marco regulatorio, otros países lo hacen sin brújula, en un mercado aún marcado por la desregulación y el riesgo de exclusión de comunidades locales.